Para que la noche sea noche, no es necesario adornarla de murciélagos y de amantes, ni de fantasmas o prostitutas.
Para que la noche luzca su condición de tal no hace falta llenarla de lagrimas de engañados ni de bocas que besando engañan.
No hace falta colgarle el cartel borroso del miedo ni la triste luz de cien lamparitas.
Para que la noche sea verdaderamente noche, hace falta que te recuestes a mi lado, que me dejes entrar en ti como el colibrí en la flor o el río en el mar.
Que me des la llanura de tu espalda y me pidas que te abrace con la necesidad imperiosa de quien muerto de sed pide agua.
Para que la noche sea sinceramente algo mas que oscuridad, no hace falta mas que pronunciar tu nombre y entrar al día con tu cuerpo en mis brazos.
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8 comentarios:
Si es así
puedo decir que aun no vivo ninguna noche...
quizás me duermo demasiado temprano..
Excelente post!!
me dejaste atónita
saludos
excelente !!!...hermoso blog!
Dandome un poco de aire en el blog de Rodolfo Serrano, decidí por primera vez entrar en algunos de sus links... y llegué aquí...
Y como no podía ser de otro modo, he encontrado aquí también ese aire, ese deseo por vivir, por soñar, por recrearse...
Gracias por compartir tus letras... pasaré seguido a respirarlas...
Saludos
"La llanura de tu espalda..."
¡Que bonitoooo!
Bonito, muy bonito...
Todo lo qe no fuimos
¡Que doloroso pensar eso.!
Acabo de topar con tu blog y acabo de encontrar alguna palabra que hacía tiempo mi garganta quería soltar.
El post me parece increíble.
Ahora, seguiré devorándolo.
Saludos
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